domingo, 10 de junio de 2012

Personas, personas everywhere!

Últimamente uno se topa con personas ridículas, estúpidas, carentes de masa gris, cínicas, que padecen desapego o simples egoístas pero, sobre todas las cosas, uno se encuentra con personas pelotudas y/o crueles. Debo decir que la culpa la tienen los mayores (+16) por ni siquiera molestarse en enseñar a sus maleducados, asquerosos y crueles hijos a vivir dignamente y sin joder al prójimo. En su lugar crece la prole inútil para jodernos la vida a todos y dudo que el simple intento de educarlos sirva de algo cuando ya le maduraron las pelotas a esos.

Pero vamos, estoy muy ilusionada de que ese otro tipo de personas (completamente opuesto a lo primero) tengan sus propias crías y/o adopten y creen así un linaje más amenode gente buena, vivaz y educada. Sin niños torturadores de gatos, y sin padres que se quedan mirando la caja boba (TV) en lugar de cagarlos a pedos por hacer algo mal, o simplemente darles vuelta la cara porque hicieron algo realmente malo (véase maltratar a la mascota, que llegó primero en muchos casos, y de que luego la mayoría tiende a olvidar cuando llegan los bebés). Detesto con devoción a la humanidad, pero no a toda, simplemente a la que no tiene dos dedos enfrente como para poner una barrera entre lo que se puede y lo que no se puede hacer a otros.

Y sí, estoy a favor de darle una buena cachetada a un niño si lo veo encerrando a un pobre gato en una bolsa de nailon. Y también estoy a favor de castigar con una varita a un perro que muerde la mano de alguien. La violencia (sin excederse) es necesaria, especialmente en los seres humanos, debería haber menos tolerancia sobre estas cosas.

martes, 5 de junio de 2012

Donación de Furbys, por favor...



Yo sé que en el fondo todos llegaron a odiarlo y cansarse de él. Incluso muchos deben tenerlo aun encarcelado en un cajón porque de niños (o adultos) tenían ese inexplicable terror de dejar a su furby suelto mientras se iban a dormir. Todos hemos odiado y temido al furby en algún punto de nuestras vidas, el de nuestra hermana o vecino repetía cosas extrañas y nos miraba fijamente como si quisiera algo de nosotros. Como si tuviesen algo que decirnos además de sus típicas frases «Te quiero Abuelo» (Furby ocultando simpáticamente una de sus parafilias más comunes, la gerontofilia), «No, abajo no, porrrrfavvvvvoorrrrr»«Prrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrrr» (Mientras tiene un orgasmo)

(Furby al desnudo).

Los furbys son peluches electrónicos fabricados por Tiger Electronics, supuestamente, inspirándose en la apariencia de algunos roedores, gatos, murciélagos y búhos. Pero todos sabemos que eso es falso y se inspiraron en Gizmo de los gremlins.

Para quienes se sentían estúpidos por temer a un extravagante peluche, ahora saben que estos pensamientos o creencias eran colectivos, y que mucha gente hasta el día de hoy cree que los furbys tienen algo diabólico. Algunos niños han tenido pesadillas durante meses por dormir al lado de uno de estos (me encantan las cosas que provocan pesadillas en los niños), se decía que incluso algunos niños terminaron suicidándose luego de pasar sus días de juego con furbys de distintos tipos, de esta forma nace Fonzo en "Los Simpsons" que obligaba a los seres humanos a ser compradores compulsivos. Increíblemente esta historia es cierta (La de volverse compradores compulsivos xD) durante los 90' sus ventas se dispararon y mucha gente tuvo que aguardar horas de cola a las puertas de los comercios para adquirir un ejemplar. Pero bien, volviendo al tema de la maldición: Los furbys son en realidad criaturas violentas en peligro de extinción. Debido a que la mayoría los odiaba y los llevaba a su plaza cercana para quemarlo públicamente. Recuerdo que en una época venían en La Cajita Feliz del McDonald y los niños les hacían cosas horribles como ponerlo en la ruta para que lo pasen por arriba los coches, extirparle los ojos y demás. Pobres Furbys, algunas de las creencias más comunes en esa época era que los furbys tenían la capacidad de quemar casas, volverte loco, matar a tu madre, a tu perro y a tus abuelos (y luego tener sexo con ellos), meterse entre tus sábanas y darte escozor con su pelo cuando dormías, atraer malas ondas, demonios, duendes y demás alimañas. Lo cierto es que no cuentan tus secretos y no aprenden un carajo. Pero su memoria es increíblemente resistente y duradera (por ende recordará la cara de su agresor aunque éste lo haya arrojado a la parrilla) a menos que se queden sin pilas, ahí sí cagaron.

Ahora sí, el momento violento del blog :D

Mis queridos humanos, si alguien tiene un furby del que quiera deshacerse yo los adoro y le daré hogar. Pretendo usarlos para matar zombies en el apocalipsis*. Así que le dan una patadita en el culo a su furby y me lo mandan para Luján. Pueden irse a dormir en paz sabiendo que un furby jalará de sus patas en la noche por todas las atrocidades y maltratos que le han dado.